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dimarts, 30 d’octubre del 2018

Pop británico entre 1976 y 1983 : de la euforia a la melancolía

Comentarios a la lista de reproducción de youtube que estoy haciendo.

Entre 1976 y 1983 la música británica alcanzó su penúltimo esplendor después de unos años sesenta asombrosos,  desde la era del beat y el rhythm & blues blanco, seguidos del blues rock, el rock de vanguardia y el folk y el rock psicodélicos. Todo esto en apenas siete años, de 1963 a 1970. Lo que siguió ya en los 70, el rock progresivo y el glam, parecían pálidos remedos de todo lo anterior.

Cinco años de naderías (con la excepción de David Bowie, obviamente) y ya en 1976 la explosión del punk, y de su mano, la new wave, y después el post punk, el synth pop, el rock siniestro, los new romantics, todo en atropellada sucesión, de nuevo en apenas siete años de, de nuevo, pasmosa creatividad, como todos apreciaremos si escuchamos esta

lista de reproducción.

1975: Queen - Dos temas del álbum "A night in the opera": Bohemian rhapsody y The prophet's song

1975: Bay City Rollers - Lovely to see you (ya existían las boy bands en 1975. (Antes de ellos Donny Osmond dejó el pabellón bien alto. Su rollo semi beatle y ese bonito riff de guitarra que suena durante todo el tema les ayuda a estar a la altura de su predecesor. Sólo fallan las pintas...)

1975: Greg Lake - I believe in Father Christmas (un villancico pacifista, tan imbuido del espíritu hippie que cuesta creer que sea de 1975. Es el Lake de Emerson, Lake & Palmer. Primero militó en King Crimson. También cuesta creer que acabara haciendo música tan, digamos, asequible. Y en el vídeo que circula por ahí del tema ves que querían sacarlo guapo.  Una especie de estrella pop accidental, pues esa faceta, el pop, no volvió a tocarla más. Murió recientemente, en 2016. Descubrir toda esta información como antitética y paradójica de golpe me ha causado una pequeña conmoción. Que era guapo, que militó en King Crimson y que ya está muerto, de viejo)

1975: Dr Feelgood - I'm a men (directo en Sheffield, editado en su álbum "Stupidity")

1975: Peters & Lee - Comin' home (esta canción seguro que sonaba en las casas de los padres de Stuart Murdoch y Bob Stanley)

1975: Mike Oldfield - Caras A y B del single In dolci jubilo / On horseback (incocencia pastoral y sutil desvarío psicodélico; una delicia que si ahora sólo tendría sentido en la escena indie en este año llegaba a lo más alto de las listas inglesas de singles)

1976: David Bowie - Station to station

1976: Thin Lizzy - The boys are back in town

1976: Eddie & The Hot Rods - Gloria / Satisfaction (en directo. Espídica versión de dos clásicos de 10 años atrás hechos con todo el ardor hormonal adolescente por todos : por los Stones y los Them en su momento y ahora por los Rods, que hacían intenso, tosco rock, tan distinto del prog rock de entonces como idóneo para la inminente explosión del punk)

1976: Graham Parker - Fool's gold

1976: Nick Lowe - So it goes

1977: Sex Pistols - Never mind the bollocks. El primer y único álbum de una de las bandas más influyentes de la historia del rock. No es lo mismo escuchar "Anarchy in the U.K." y "God save the Queen" cuando tienes 15 años y no entiendes otra cosa que el título de la canción que oírlas en detalle y luego oír con aún más detalle el resto de las canciones. No lo había hecho hasta ahora y ya entiendo a John Lydon cuando en una entrevista de hace algunos años en la Rockdelux afirmaba, ante la incredulidad del periodista, que todas las canciones de Sex Pistols no encerraban mensaje social alguno: no eran más que chistes de barra de bar. Eran chistes de chavales de clase obrera que bebían mares de cerveza y se divertían a lo bruto, a lo hooligan, los fines de semana. Todo lo que se montó alrededor se dice que no fue tan espontáneo como nos pareció a los españoles años más tarde: hubo cálculo comercial, manipulación por parte de negociantes de la música como Malcolm McLaren... Lo curioso es que este disco tóxico lo editó Virgin y fue un gran éxito. Yo sólo salvaría "Problems": ahí hay un gran tema con un gran estribillo, que probablemente influyó a Nirvana. Todo lo demás es estúpido, abyecto, violento, sin sentido, y musicalmente no ofrece nada especial. Entiendo que pudiera atraer en su momento, pues, paradójicamente, las letras de sus singles de éxito parecían ofrecer una visión crítica de su país, pero más de uno se quedaría de piedra al encontrarse con la banalidad de casi todas las letras, que no eran más que chistes privados. De las pocas que se entendían rezumaba machismo y clasismo ("Bodies") y homofobia ("New York").

Sólo eran unos adolescentes que apenas sabían tocar, metidos en una vorágine que, por ejemplo, se llevó por delante a Sid Vicious. Vicious protagonizó asimismo un terrible episodio de violencia machista, pues al parecer asesinó a su novia de una puñalada en el abdomen. Aquí las palabras de John Lydon: "hicimos todo lo posible por deshacernos de Nancy... Lo estaba matando. Yo estaba absolutamente convencido de que esta chica estaba en una misión de lento suicidio... Solo que no quería irse sola. Quería llevarse consigo a Sid... Era una loca tan de mierda y mala" (wikipedia). Esta gente, que hizo y dijo estas cosas fue durante décadas referentes de muchos otros.

Este machismo terrible, abominable, que explotaba en las actitudes de los grupos de pop desde tiempos, al menos, de los Beatles, no ha sido analizado con suficiente atención. De algún modo el pop y el rock, con su hijo más ferozmente machista que es el hip hop, y esos otros nietos no menos misóginos que son el reguetón y el trap, se demuestran una traba considerable en el acercamiento de hombres y mujeres: los grupos y las escenas musicales son clanes de hombres en los que la mujer apenas tiene otra función que estar buena y acostarse con quien sea cuando toque. La independencia masculina es el rechazo al trabajo de nueve a cinco. El trabajo de nueve a cinco es el que se necesita para mantener una familia. Por tanto, la familia, el compromiso, los hijos, son algo despreciable. El hombre, por medio del pop y del rock, músicas que, no os vayáis a creer, venero, se libró de su condición de esclavo laboral pero a cambio de destruir muchas vidas de mujeres por el camino, de dejar muchos niños traumatizados, solos, criados sin padre... Las biografías y, mejor, la chismografía que rodea a las personalidades del rock es una fuente inagotable de vergonzosas patadas en nuestro sentido de la empatía: estos han sido nuestros héroes durante muchos años. Desconocíamos la cara B.

Fotograma de "Holidays in the sun", de Sex Pistols. Sid Vicious a punto de escupir a cámara, ese gesto tan
repetido dentro de la escena punk desde entonces. Julien Temple montó
este vídeo en 2012, con imágenes de un concierto de la banda en septiembre de 1977 en un pueblo de Cornwall llamado
Penzance. Un solo cámara (sin acreditar). Las imágenes de la banda de Berlín las tomó su mánager, John Tiberi
Y a pesar de todo lo dicho no dejo de escuchar con fascinación el único disco de los Sex Pistols. La prueba es ponerlo en el contexto de la música británica de la época (justo en el momento inmediatamente anterior al surgimiento del punk) y notar, en cuanto suena la memorable intro de "Holidays in the sun", el sonido de soldados marchando en formación, cómo me sube la adrenalina, cuán diferente era de lo que sonaba entonces. Esa contundencia destartalada y, en especial, la chulería hiriente de Johnny Rotten, en conjunción con las insólitamente crudas letras, son la fórmula infalible que suscitó la fascinación inmediata de la chiquillería. Si a eso le unimos la imagen rompedora, esos pelos de punta, los pantalones ajustadísimos de cuero, las camisetas rasgadas que dejaban al descubierto brazos y parte del torso -al parecer producto, esa imagen, de algún / a diseñador de entre la cohorte de su primer mánager de la banda, Malcolm McLaraen- aún está más clara el súbito interés de la parte más joven del público en esta especie de héroes gamberros, hijos aparentemente de la calle, de las calles encharcadas, sombrías de los peores barrios londinenses...

Visto así, desde el presente, el fenómeno Sex Pistols, no dista mucho en cuanto al contexto de lo que supuso a finales de los 80 la explosión del hip hop como fenómeno de masas. N.W.A., sin apenas ideología pero una contundencia abrasiva, serían los epítomes angelinos de la banda de Johnny Rotten y compañía; Public Enemy, con su cargamento de agravios contra el sistema, serían al hip hop lo que The Clash supuso dentro del punk: la enzima necesaria para que dicho género pudiera ser digerible para el consumidor / crítico medio del rock.

A día de hoy, en nuestro país, se ha experimentado algo parecido con el fenómeno trap: Pxxr Gvang atrapando a millones de chicos muy jóvenes, no necesariamente de clase baja u obrera, necesitados de esa inyección de adrenalina, de ese subidón de sentirse joven, de ser importante porque eres joven, de ser importante por fin... La juventud como tierra prometida, la juventud como salvación frente al muro infranqueable que la separa del mundo adulto. No hay aún dentro del trap ningún artista "serio" que pueda "redimirlo". Mientras no sea así no dejará de ser una "música de barrio" (ver mi post sobre el mismo dentro de este blog).

Visto así, el punk surgió en medio del marasmo de la crisis del petróleo en el Reino Unido. La era dorada del hip hop, a finales de los 80, coincidió con el punto álgido de las políticas neoliberales en EE.UU., en un momento en que a fuerza de repetir la idea de que el sueño americano es para quien se lo trabaja, una generación entera de negros se vio, de pronto, rodeada de un muro de indiferencia, hostilidad y epítetos despecitvos. El trap español, por último, surge después de una concienzuda labor de eliminación de las posibilidades para los jóvenes de las empobrecidas clases medias de lograr siquiera los ralos logros de sus padres.

Ante muros tan inexpugnables es preferible negarse a crecer.

1977: Graham Parker - Fool's gold (directo, concierto emitido por la BBC)

1978: Public Image Limited - Public image, primer tema de la cara B del primer álbum de la banda, titulado "Public image. First issue" y single extraído del mismo. Pues sí, en dos años Lydon creó el punk (al menos como movimiento) con los Sex Pistols para, acto seguido, crear una forma musical antitética, el post-punk. De las neblinas emotivas y depresivas creadas entonces vivió el rock de guitarras alternativo o independiente británico durante casi una década. Las oleadas revivalistas del indie en los años 2000 devolvieron a esos sonidos un lugar preeminente en los gustos de la clientela de la música alternativa. Interpol, Franz Ferdinand, Bloc Party, Kaiser Chiefs y tantos otros se aferraron a la melancolía y a los ritmos sincopados, como queriendo redimir el poquísimo eco comercial que tuvieron esos sonidos majestuosos en una era, el cambio de décadas entre los 70 y los 80, en los que la música pop y rock comericales tal y como se conocían hasta entonces parecieron sacrificarse para renacer con nueva apariencia más fuerte y agresiva que nunca, dispuestas a conquistar el mundo por todos los medios, ya en los 80.

1978: David Bowie - Station to station (directo, versión del disco de directos "Stage")

1978: Nick Lowe - So it goes (directo)

1979: Sham 69 - White riot (en directo). La canción se editó en 1987 en el álbum "Live and loud!". Punk a toda pastilla, de lo más contundente de la escena

1980: Ian Dury & The Blockheads - Fucking Ada

1981: Depeche Mode - Shout, de su LP "Speak and spell". Aparecido como cara B de uno de los singles del álbum es, en cambio, el tema que más se parece a lo que haría el grupo desde 1987, ese tecno pop de tintes gótico-industriales, en una evolución que los llevaría a recoger los sonidos que, precisamente en el año de su debut, removían el underground británico, como haciendo justicia a lo que realmente hubieran querido sonar.

Fotograma del vídeo "White boys and heroes" de Gary Numan,
de 1982. Los buitres sobrevuelan los restos de la nueva ola
británica. El Reino Unido volvía a caer en la irrelevancia
musical
1982: Gary Numan - "White boys and heroes". Numan hace una pobre imitación del Bowie de finales de los 70, época en la que su "Are friends electric?" adelantaba y dejaba lelo a todo el mundo. Menuda paradoja: Bowie seguro que se murió de envidia cuando salió el sensacional single de Tubeway Army en 1978. En cualquier caso la letra de la canción es una crítica contundente al cine de superhéroes - supermachos estadounidense: "Los héroes son gente dura, y no tienen tiempo para mujeres y niños." Siempre chicos blancos heroicos. Lo lamentable es que esa clase de películas y de protagonistas (casi siempre hombres blancos) siguen llenando las salas de cine de medio mundo. El Reino Unido vivió la ficción en esos cortos periodos de tiempo en que su música dominó el mundo de que no eran una mera provincia del imperio; ya en 1982 Numan no hacía más que constatar la derrota. El imperio se había sacado de la manga los taquillazos de acción descerebrada para tenernos sometidos a todos a su dominio.

1983: Echo & The Bunnymen - Tres temas del elepé "Porcupine": Clay, Heads will roll y Ripeness

1983: Thin LIzzy - The boys are back in town (Thunder & Lightning Tour)

1983: Uropa Lula - Fell upon a jewel (o de cómo el éxito de Duran Duran, y su fórmula de sofisti pop, funk blanco y guitarras raritas tipo Talking Heads hizo aparecer clones como hongos. Algunos, como Talk Talk, pronto crecieron y abandonaron el nido como esplendorosas aves adultas; otros, como Kajagoogoo, al menos supieron añadir algo de personalidad a la fórmula; por último, grupos como este no pasan del quiero y no puedo. Contaban, al menos, con un buen bajista, el estadounidense Allan Dias, que luego militó en Public Image Ltd. entre 1986 y 1992)